Ninguna de las tecnologías que dominan la vida cotidiana de las personas durante los meses que ha durado la emergencia sanitaria provocada por la pandemia de Covid-19, sobre todo en el ámbito laboral, es nueva; lo que sí es una novedad es el nivel de adopción de estas tecnologías, como es el caso del cómputo en la nube o cloud computing, para las empresas.

Cloud computing o computo en la nube permite contar con recursos tecnológicos como copias de seguridad, infraestructura y servicios gestionados, mediante el acceso a los servidores de un proveedor especializado, reduciendo la inversión en equipos propios, mantenimiento y actualización. Es la base primordial para brindar soluciones en la nube para empresas, convirtiéndose en la mejor opción y el método más utilizado.

Dicho de otro modo, esta tecnología permite cambiar un modelo tradicional de adquisición tecnológica o CAPEX por un modelo de pago por funcionamiento mensual, también conocido como OPEX. Además de que muchas compañías permitieron a sus empleados trabajar en casa de forma remota, el entretenimiento, las finanzas, los comercios y la salud son los sectores que mayor adopción de servicios de nube han experimentado durante la pandemia de Covid-19.

También el modelo de nube puede ofrecer distintos niveles de servicio: la infraestructura como servicio, que incluye a los servidores, la virtualización, los sistemas operativos, monitoreo y soporte; las plataformas como servicio, que abarca sobre todo a los servicios de administración y desarrollo de aplicaciones y microservicios, y el software as a service o las aplicaciones y servicios que se ofrecen a los usuarios finales.

Cloud computing

¿Cómo funciona el Cloud computing?

Cuando hablamos de cloud computing podemos diferenciar dos partes: frontend y backend, conectadas entre sí a través de una red (normalmente Internet). El frontend es la interfaz que ve el usuario mientras que el backend es la nube.

La interfaz incluye la computadora del cliente (o red informática) y la aplicación requerida para acceder al sistema de cloud computing.

En la parte posterior del sistema o backend se encuentran los diversos ordenadores, servidores y sistemas de almacenamiento de datos que crean la «nube» de servicios informáticos. En teoría, un sistema de computación en la nube podría incluir prácticamente cualquier programa de informática que puedas imaginar, desde programas de procesamiento de datos hasta videojuegos en línea.

Un servidor central administra el sistema, supervisa el tráfico y las demandas del cliente para garantizar que todo funcione sin problemas. Sigue un conjunto de reglas llamadas protocolos y utiliza un tipo especial de software llamado middleware. El middleware permite que las computadoras en red se comuniquen entre sí.